En general, los alojamientos de hoteles en todo Portugal tienen una buena relación calidad-precio, especialmente en comparación con otros países del oeste de Europa.
En cualquier localidad del país se pueden encontrar tanto hoteles baratos que ofrecen servicios esenciales y eficientes, como hoteles de 4 o 5 estrellas que proponen estancias de alto nivel.
Las tarifas se nivelan con el período de temporada alta, por lo que de mayo a octubre, sobre todo en las localidades de la costa, los precios suben.
Pero a pesar de la afluencia de turistas, la disponibilidad de alojamientos y la variedad de la oferta no disminuyen, y se pueden encontrar buenos hoteles en casi todas las regiones del país. Hay que prestar atención a Lisboa, Oporto y el Algarve, que son las zonas de Portugal más visitadas por los turistas de toda Europa; aquí es aconsejable reservar con antelación para aprovechar las mejores ofertas y tener la máxima disponibilidad.
Aquí tienes una miniguía de los mejores lugares para alojarse en Portugal, dividida por tipos y adecuada para cualquier tipo de viaje, ya sea una escapada rápida a la ciudad, unas vacaciones en la playa o un itinerario con etapas de historia y paisajes.
Tanto Lisboa como Oporto ofrecen una amplia gama de alojamientos, que van desde hoteles baratos hasta hoteles de lujo. La elección de qué categoría de hotel elegir depende claramente del presupuesto de vuestras vacaciones.
En general se puede decir que hay que valorar bien cuánto tiempo se pasará en el hotel para poder disfrutar realmente de las numerosas comodidades. Si pensamos en los spa, gimnasios o en los restaurantes con estrellas de los hoteles.
Una vez seleccionada la categoría de hotel que se está buscando, hay que localizar la zona donde deseamos alojarnos. Os aconsejamos buscar un hotel cerca del casco antiguo o si no cerca de una parada de transporte público que pueda permitiros desplazaros rápidamente entre los distintos lugares turísticos y que favorezca las conexiones con el aeropuerto o la estación de tren.
Una zona cerca de restaurantes puede ser la preferida si no tenéis intención de comer en el hotel.
En Lisboa no faltan opciones de alojamiento. Es aconsejable elegir la zona donde dormir también en función de la tranquilidad que queráis tener durante vuestro descanso.
Las calles de Lisboa, sobre todo en el Bairro Alto y en Chiado, son muy animadas por la noche, gracias a los numerosos locales presentes en las callejuelas.
Si queréis estar lejos de la ruidosa vida nocturna, tened en cuenta la posibilidad de alojaros en la zona de la Expo, el Parque das Naçoes, la Praça Marqués de Pombal o en el histórico barrio de Alfama, que aunque es frecuentado durante el día, por la noche tiende a tener tonos más apacibles.
Oporto es una ciudad cada vez más visitada por los turistas, por lo que los hoteles aquí están tratando de personalizar cada vez más los servicios que ofrecen para satisfacer las necesidades de cada visitante.
Los barrios donde poder alojarse son numerosos; está por ejemplo Ribeira do Porto, famoso por sus casas de colores y por sus animadas calles con bares y cafeterías. El mismo casco antiguo de Oporto es el lugar ideal para los que quieran conocer la historia y la cultura de esta ciudad.
Enclavado a orillas del río Mondego, Coimbra es a la vez una ciudad culta y elegante, ideal para los amantes de la historia y la cultura, y una ciudad animada que atrae a los jóvenes con su vibrante vida nocturna. Es famosa por ser la sede de la universidad más antigua de Portugal y la antigua capital del país.
El Algarve es la región más visitada de Portugal después de Lisboa. ¿El motivo? 150 kilómetros de costa con playas salvajes en un bello entorno natural y bañadas por el sol durante todo el año Faro, Lagos e Albufeira son los centros turísticos más populares, donde puedes encontrar muchos alojamientos de diferentes precios, adecuados para cualquier tipo de vacaciones: pueblos de vacaciones para familias, hoteles y b&b románticos para parejas, albergues baratos para jóvenes surfistas.
Hay numerosos hoteles con vistas al mar, y a menudo son los hoteles de lujo los que ocupan esta ubicación exclusiva. Sin embargo también se pueden encontrar hoteles con tarifas más bajas que ofrecen hermosas vistas del océano.
La fórmula propuesta para la estancia va desde el todo incluido en los complejos hasta la fórmula de sólo alojamiento, con o sin desayuno.
Una gran alternativa al Algarve para unas vacaciones de playa en Portugal es la Costa Verde, en el norte del país. Menos turística, es muy popular entre los lugareños. El número de alojamientos e instalaciones para los turistas es menor, pero los precios son en promedio más baratos.
Si quieres concentrar tus vacaciones en Lisboa y sus alrededores para visitar la cultura y el mar, puedes añadir un par de noches en Estoril o Cascais a tu estancia en la capital.
En general, los hoteles cercanos a la playa ofrecen una comodidad apreciada tanto por las familias, que pueden encontrar un lugar seguro para llevar fácilmente a los niños a la playa, como por los adultos que viajan en pareja o con amigos.
A menudo, estos hoteles proponen actividades de deportes acuáticos para los más aventureros, organizados por el personal del hotel; a veces en cambio ofrecen playas privadas, una atracción bastante interesante para aquellos que buscan privacidad e intimidad.
Los hoteles cercanos a las playas en Portugal normalmente disponen de piscinas al aire libre, que dan al mar, equipadas con sombrillas y tumbonas. En los hoteles de categoría superior, a menudo hay un bar lounge junto a la piscina donde se organizan las noches con música en vivo.
Forman parte del territorio portugués también los espléndidos Madeira (isla principal del archipiélago homónimo) y el archipiélago de las Azores. Situadas en medio del Océano Atlántico, mucho menos visitadas en comparación con las islas españolas (Baleares y Canarias), son lugares de belleza salvaje donde se puede admirar una naturaleza exuberante y pasar unas vacaciones memorables hechas de tardes de pereza al mar y espléndidas caminatas entre montañas y volcanes.
El turismo está bien desarrollado en las islas principales, con una amplia oferta de hoteles y apartamentos. En las islas más pequeñas y remotas, no siempre es fácil encontrar un lugar donde alojarse.
Los mejores lugares para dormir en las islas portuguesas son Funchal, la capital de Madeira, Ponta Delgada en la isla de Sao Miguel, la mayor de las Azores, y Santa María, considerada la isla con las playas más bonitas. Para los amantes de la naturaleza y la tranquilidad, recomendamos Vila de Baleira, en la isla de Porto Santo, a unos 40 km de Madeira.
Alojamientos en Madeira Alojamientos en las Azores
Dejando atrás las ciudades y las playas de moda, Portugal revela su alma más profunda en paisajes rurales de belleza inquietante y pueblos pintorescos donde el tiempo parece detenerse.
Fácilmente accesible en tren desde Lisboa, la ciudad de cuento de hadas Sintra se visita a menudo como destino de una excursión de un día. Para apreciar plenamente su ambiente único y visitar todos sus elegantes edificios, quédate al menos una noche; añade una o dos noches más si quieres regalarte días de surf o de relax en las cercanas playas de Colares o de senderismo en los bosques del parque natural de Sintra-Cascais.
La ciudad medieval mejor conservada de Portugal es Evora en el centro-sur del país. Encaramado en la cima de una colina que domina la llanura del Alentejo, es un pequeño tesoro que conserva las huellas de un pasado milenario entre sus muros del siglo XIV.
Una zona ideal para un viaje temático es el Valle del Duero, en el norte del país. En la región vinícola más famosa de Portugal podrás degustar vinos finos en bodegas tradicionales, admirar valles fértiles e impresionantes desfiladeros y alojarte en ciudades con encanto como Piñhao y Regua.
La cantidad, el tipo y el precio del alojamiento en el interior de Portugal varía mucho según el lugar. Sintra ofrece muchas opciones, desde fabulosos hoteles de lujo hasta pequeños hoteles económicos y b&b. En los pueblos menos visitados, el alojamiento es escaso y no siempre barato. Un ejemplo de ello es Fátima en los pueblos menos visitados, destino del turismo religioso, el alojamiento es abundante pero generalmente carente de encanto.
Hoteles en Sintra Alojamientos en Évora Alojamientos en la Valle del Duero
Alojarse en un hotel de lujo sin duda aumenta considerablemente el grado de relajación que se puede alcanzar durante una estancia en Portugal.
Ya sea que estéis en la costa o en la ciudad, poder alojarse en una estructura donde todo o casi todo es servido os hará desear permanecer allí para siempre.
Hay algunas cosas obligatorias que estos hoteles tienen que respetar: en primer lugar, es un punto clave ofrecer un buen centro de spa y una zona de gimnasio para sus huéspedes. La atención a la cocina es importante; a menudo los hoteles albergan restaurantes premiados con estrellas Michelin y dirigidos por chefs de renombre internacional.
La tecnología es indispensable en el siglo XXI, desde wi-fi a la televisión por satélite. A estos se suman el servicio de habitaciones, los servicios de traslado, las reservas para museos y transportes y las exigencias personales de los clientes, que el personal de los hoteles estará encantado de satisfacer.
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